La red captaba comida que estaba fuera de la fecha de consumo o a punto de caducar y la reetiquetaba para distribuirla a penitenciarios de todo el país. La ley obliga a destruir o incinerar estos alimentos.
FACUA.ORG.- Una trama de varias empresas de toda España distribuyó jamón caducado por las cárceles del país. Según informa el diario Economía Digital, los penitenciarios españoles sirvieron a los reclusos jamones, embutidos y carnes en malas condiciones al menos hasta finales del año pasado. La red de productores y distribuidores de jamones y embutidos captaba comida caducada o a punto de hacerlo en los supermercados y en vez de enviarla a centros especializados para ser destruida o incinerada, como obliga la ley, cambiaba las fechas de caducidad y las vendía a las cárceles españolas. Sólo Cataluña y Baleares no fueron destino de esta comida en mal estado. El alcance de esta trama está siendo investigada por un juzgado de Fregenal de la Sierra, en Badajoz. Los delitos de los que se les acusa a estos treinta empresarios van contra la salud pública. Hasta el momento son cuatro los empresas imputadas en el caso: Valle de los Valfríos, Cash la Temporada, Pescados Saraymar y Porkytrans. Sería esta última, con sede en Murcia pero que operaba en toda España, la que distribuyó los jamones reetiquetados en la nave de la empresa Valle de los Valfríos. El propietario de Porkytrans, la empresa que distribuía de los jamones en mal estado, Andrés Narváez, ha declarado como investigado ante la Guardia Civil y ha señalado que las imputaciones de la benemérita son producto de una ‘confusión’. ‘Yo no vendía productos ni caducados ni podridos. Esa fue una acusación que me hicieron pero no es cierta. Me obligaron a destruir toneladas de mercancía, pero voy a demandar a los veterinarios de la Junta de Extremadura’, añade el empresario. Los investigadores, por su parte, consideran que no ha explicado con claridad la existencia de manipulación de embutidos en sus naves. Instituciones Penitenciarias ha rescindido contratos de suministro de alimentos Instituciones Penitenciarias ha confirmado que ha rescindido el contrato de suministro de alimentos con la empresa Porkytrans, donde los agentes del Seprona irrumpieron por sorpresa en abril para incautarse de documentación e inspeccionar sus almacenes, según informa el diario. Según este organismo dependiente del Ministerio del Interior, la empresa recibió varios avisos por entregar mercancía en condiciones inadecuadas, sin especificar cuáles eran las carencias. Por lo que le envió varias advertencias antes de cancelar definitivamente su contrato. La juez cree que la trama obtenía beneficios millonarios al vender comida destinada a la destrucción para los presos. Por el momento, sólo hay una decena de imputados, aunque la investigación prevé llegar a la treintena.