LAVANGUARDIA (EFE).- El PP ha presentado en el Congreso de los Diputados iniciativas en las que pide medidas para evitar beneficios penitenciarios a condenados por sedición que no se arrepienten como la semilibertad concedida por la Generalitat de Cataluña a los nueve líderes independentistas condenados por el procés presos.
La Generalitat ha aprobado dicho régimen para los presos condenados por su participación en el proceso de independencia de Cataluña, por el que solo tendrán que ir a la cárcel a dormir entre semana, una medida que podrá ser revisada por el Tribunal Supremo.
El grupo popular considera que “el tratamiento penitenciario no puede vaciar el contenido del Código Penal”.
Por ello ha presentado varias preguntas al Gobierno relacionadas con estos “privilegios penitenciarios” en las que argumenta que “en la sociedad española preocupan las actuaciones realizadas por distintas instituciones públicas que están suponiendo de hecho beneficios para los condenados por sedición”.
El PP señala que estos presos, “condenados por sedición por sentencia firme del Tribunal Supremo, están recibiendo de forma generalizada y prácticamente automática los beneficios penitenciarios previstos en el artículo 100.2 del reglamento penitenciario, dejando de facto en papel mojado las penas impuestas por unos delitos de especial gravedad”.
Recuerda que dicho artículo prevé su aplicación con carácter excepcional e individualizado pero estima que “las decisiones adoptadas por las autoridades penitenciarias catalanas que afectan a los condenados por sedición están teniendo un carácter general”.
“Igual sucede con la reciente propuesta de progresión de grado para estos reclusos mediante la aplicación del artículo 72 de la ley general penitenciaria cuando es evidente que por la evolución de su tratamiento no se están haciendo merecedores” a la misma.
Los diputados populares advierten de que “concurre en ambos casos que no se está teniendo en cuenta que los penados no muestran signo alguno de arrepentimiento por los delitos cometidos” e incluso “afirman que los volverán a cometer”, con lo que “se constata que estos presos no están reinsertados ni en camino de ello”.
El PP plantea al Gobierno que para acceder a un nuevo grado penitenciario se exija que los reclusos condenados por delitos especialmente graves como el de sedición renieguen de los actos delictivos cometidos, muestren arrepentimiento y signos inequívocos de haber abandonado la voluntad de reincidir y colaboren activamente para impedir la comisión de otros análogos.
Además el grupo popular ha presentado una proposición no de ley para instar al Gobierno a que adopte medidas para garantizar una correcta aplicación de las penas impuestas a los condenados por delitos de sedición y contra la Constitución, así como a los de terrorismo.
En concreto propone impulsar modificaciones legislativas para garantizar la correcta aplicación por las autoridades autonómicas catalanas de las normas penitenciarias cuya competencia tienen transferidas e impedir el pase al tercer grado de los condenados por delitos de sedición.
El PP reclama reformar el Código Penal para recuperar el delito de rebelión impropia, introducir el cumplimiento íntegro de las penas para condenados por rebelión, sedición y terrorismo y restablecer el delito por convocatoria de referéndum ilegal.
En su iniciativa el PP plantea renunciar a cualquier negociación para traspasar competencias penitenciarias al País Vasco, paralizar la política de acercamiento de presos condenados por terrorismo e impedir los homenajes públicos a terroristas.
Por último, modificar la ley de financiación de los partidos políticos para que los que tengan dirigentes condenados por rebelión, sedición, colaboración con banda terrorista o apología del terrorismo no puedan recibir fondos públicos.