Funcionarios de prisiones alertan de cuatro casos positivos, uno de ellos «sin control», mientras el confinamiento de 84 reclusos obliga a suspender el traslado de un acusado a su juicio en Valencia.
LAS PROVICIAS (JUAN ANTONIO MARRAHÍ).- La pandemia se cuela entre rejas. Cuatro internos de la prisión valenciana de Picassent, dos hombres y dos mujeres, están en estos momentos contagiados por coronavirus, según los funcionarios de prisiones y son 84 los reclusos confinados en parte del módulo de Enfermería y en todo el Módulo de Mujeres. Esta circunstancia derivada de la crisis sanitaria tiene también una repercusión directa en la ya de por sí colapsada justicia. Un juicio programado para esta mañana en la Ciudad de la Justicia ha tenido que ser suspendido precisamente porque iba a ser juzgado uno de esos presos de la Enfermería confinado por prevención para evitar contagios.
El hombre, en prisión provisional, está acusado de disparar y herir a tres guardias civiles que acudieron a detenerle a una vivienda de Turís. Fue el 5 de mayo de 2017. Se enfrenta a una pena de nueve años y medio de prisión por intento de homicidio y lesiones. A las diez de la mañana de hoy debía sentarse en el banquillo de los acusados en la Sección Quinta de la Audiencia de Valencia. Pero su traslado no ha sido posible precisamente porque era uno de los confinados de Enfermería.
Los casos en la cárcel de Picassent no están exentos de polémica. La Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (ACAIP) y el sindicato UGT denuncian que uno de los internos positivos por coronavirus «ha estado seis días sin control» en la prisión. «Se le realizó una prueba PCR durante una salida al hospital que resultó positiva y nadie comunicó este hecho a la cárcel», lamentan.
Según la información recibida por el sindicato, el 30 de septiembre el preso fue trasladado al Hospital General por unas dolencias ajenas al coronavirus y reingresó en Picassent ese mismo día, unas horas más tarde.
Ya el pasado martes 6 de octubre, añaden los sindicatos, Salud Pública de la Generalitat contactó con el centro penitenciario en relación con el interno porque en su estancia hospitalaria le realizaron una prueba PCR y el resultado era positivo. En ese momento «saltaron todas las alarmas ya que el interno había estado haciendo vida normal durante esos seis días en la Enfermería de la prisión».
En ese tiempo, agregan, «ha estado conviviendo con 47 internos y con funcionarios y personal sanitario sin ningún tipo de cuarentena ni control específico sobre su enfermedad». Ante esta «alarmante situación» se ha puesto en cuarentena preventiva a ocho funcionarios que han estado prestando servicio en la planta de la Enfermería durante los últimos días. Los sindicatos han pedido a la Conselleria de Sanidad que abra una investigación para aclarar lo sucedido «y el porqué de esa falta de comunicación».
Desde Instituciones Penitenciarias cifran en cinco los casos positivos que se han detectado en la cárcel de Picassent desde que finalizó el estado de alarma, dos de ellos esta semana y un tercero que, según el organismo del Ministerio del Interior, ingresó en prisión tras estar en libertad, ya con el diagnostico positivo de la enfermedad y que permanece en cuarentena en su celda. Cifran en 84 los reclusos confinados en Enfermería y el Módulo de Mujeres y aseguran que todos los casos positivos en la prisión son, de momento, asintomáticos