ABC.ES – (AGENCIA EFE, SANTA CRUZ DE TENERIFE).- El viceconsejero de Educación, Juan Manuel Santana, ha inaugurado hoy un seminario en el que se ha presentado la iniciativa denominada Calypsos, con la que se quiere conocer las necesidades educativas de la población reclusa para así mejorar sus competencias facilitar su incorporación al mercado laboral. Este proyecto forma parte del programa comunitario Erasmus +, que coordina Centro de Educación de Personas Adultas (CEPA) de Santa Cruz de Tenerife y en el que participan otras seis instituciones, cuatro universidades y dos organizaciones no gubernamentales de Braga (Portugal), Roma, Almería y Tenerife. La coordinadora del proyecto es Ana Belén González, del CEPA de Santa Cruz de Tenerife, y quien ha explicado antes de la inauguración del seminario que se trata de conocer las necesidades educativas reales de los reclusos para abordar estrategias con las que promover que no abandonen los estudios. Se trata también de ayudar para que la población reclusa con problemas en las competencias educativas consiga sus objetivos, que alcance una titulación para incorporarse al mercado laboral con garantías, señaló Ana Belén González. El estudio se llevará a cabo en las instituciones penitenciarias de Almería, Braga, Roma y Tenerife, así como en centros de menores y de adultos de esas ciudades. Ana Belén González indicó que muchas personas reclusas estudian pero no consiguen titulación básica debido a que tienen algún tipo de carencia, y comentó que en los centros penitenciarios hay población con bastantes déficit y en ocasiones con dos a la vez, que, tal vez están diagnosticadas, pero no tratadas. Los docentes de los centros penitenciarios no pretenden tratar esas carencias, sino abordar desde el ámbito educativo las estrategias de aprendizaje, de formación, para que esa población avance, manifestó la coordinadora de este proyecto, que durarán unos dos años antes de su aplicación. Ana Belén González dijo que en el centro penitenciario Tenerife II hay alumnos que si bien no tienen diagnosticadas carencias psíquicas o intelectuales sí tienen problemas de comprensión, por lo que se les pasarán pruebas para comprobar las dificultades que tienen. También manifestó que los docentes de la prisión carecen del apoyo de personal orientador en formación de adultos, y agregó que con este estudio se verán las necesidades de apoyo que tienen los profesores. Las pruebas que se pasarán a la población reclusa la decidirán los profesionales psicólogos de las universidades de las cuatro ciudades que participan en el estudio.